Las excepciones a la regla del plazo indeterminado:

Los que “están por contrato”

Hay casos en que una empresa puede necesitar trabajadores para cubrir situaciones excepcionales y transitorias:

  • para reemplazar personal que se encuentra de vacaciones, o de licencia por enfermedad o maternidad
  • para cumplir tareas puntuales de duración ya prevista (promotoras para un evento o exposición)
  • un pedido excepcional de un cliente que exige más personal para atender esa demanda puntual de trabajo

En esos casos, la ley permite contratar personal por un tiempo determinado, de lo que debe dejarse constancia con un contrato escrito (art. 90 LCT)

Es por eso que a estos trabajadores se los llama incorrectamente “trabajadores por contrato” o “que están por contrato”, porque firman un contrato escrito. Pero todos los trabajadores en relación de dependencia tienen “un contrato” aunque no haya papel firmado, como dijimos en el capítulo anterior.

Hecha la Ley, hecha la trampa.

Es común que muchas empresas para no quedar comprometidas con una relación por tiempo indeterminado, opten por hacer figurar como “contratados” a trabajadores que en realidad hacen tareas normales en el establecimiento.

Estos trabajadores quedan en condiciones de precariedad laboral, y de gran desamparo, porque cada vez que se les vence el contrato temen que no les sea renovado.

El patrón se aprovecha de esta situación, sabe que puede abusar de este personal porque no se animará a reclamar nada por miedo a ser despedido.

La solución es un juicio.

Esta situación sólo tiene reparación mediante un juicio. El trabajador que fue “contratado” bajo esta modalidad de tiempo determinado, cuando es despedido (con la excusa de que el contrato terminó y no será renovado) puede reclamar a su empleador la indemnización por despido, explicando que la contratación por tiempo determinado no estaba justificada.

En este caso por aplicación de lo dispuesto en el artículo 1 de la ley 25.323, la indemnización por despido será duplicada. Pero, como hemos visto, la solución es dificultosa y la reparación lejana.